Revista: | Revista mexicana de ciencias forestales |
Base de datos: | PERIÓDICA |
Número de sistema: | 000458320 |
ISSN: | 2007-1132 |
Autores: | Benavides Meza, Héctor Mario1 |
Instituciones: | 1Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias, Centro Nacional de Investigación Disciplinaria en Conservación y Mejoramiento de Ecosistemas Forestales, Ciudad de México. México |
Año: | 2023 |
Periodo: | Ene-Feb |
Volumen: | 14 |
Número: | 75 |
Paginación: | 4-34 |
País: | México |
Idioma: | Español, inglés |
Tipo de documento: | Artículo |
Enfoque: | Descriptivo |
Resumen en español | En enero de 1592, Luis de Velasco, virrey de la Nueva España, solicitó al Ayuntamiento de la Ciudad de México la construcción de un lugar que sirviera para el recreo y esparcimiento de los habitantes de la capital del virreinato. En seguimiento a dicha petición, se seleccionó un sitio al poniente de la ciudad que se denominó Alameda Central y en abril del mismo año se plantaron alrededor de mil árboles de las especies Populus alba, P. nigra y Alnus sp. La Alameda de la Ciudad de México cumplió desde su creación con todos los criterios que en la actualidad se definen para un área verde urbana, entre los que destacan que el sitio sea propiedad de la ciudad, se ubique dentro de sus límites geográficos y sea de uso público para el disfrute de sus habitantes. En los años iniciales, se presentaron muchas dificultades para el establecimiento y consolidación del arbolado, debido principalmente a inundaciones periódicas y la salinidad del Lago de Texcoco. Conforme pasaron los siglos, las condiciones ambientales de la cuenca, la ciudad y la alameda fueron cambiando, lo que implicó retos permanentes para su continuidad. Se comentan las actividades que se llevaron a cabo en torno a esta situación durante el virreinato, el período post Independencia y el Segundo Imperio Mexicano, entre las que destaca la plantación de diferentes especies como sería el caso de Salix sp., Fraxinus uhdei, Taxodium mucronatum y posteriormente Ligustrum lucidum, Cupressus lusitanica y Eucalyptus sp |
Resumen en inglés | In January 1592, Luis de Velasco, viceroy of New Spain, requested the City Council of Mexico City to build a place for the recreation and leisure of the inhabitants of the capital of the viceroyalty. As a result of this request, a site was selected at the west of the city, called Alameda Central, and in April of the same year approximately 1 000 Populus alba, P. nigra, and Alnus trees were planted. Since its creation, the Alameda of Mexico City has met all the criteria currently defined for an urban green area, which include that the site must be owned by the city, be located within its geographical limits, and be for public use for the enjoyment of its inhabitants. In the initial years, there were many difficulties in the establishment and consolidation of the trees, mainly due to periodic flooding and to the salinity of Texcoco Lake. As centuries went by, the environmental conditions of the basin, the city and the Alameda changed, brining permanent challenges for its continuity. The activities that were carried out in this situation during the viceroyalty, the post-independence period, and the Second Mexican Empire are discussed, including the planting of various species such as Salix sp., Fraxinus uhdei, Taxodium mucronatum, and, subsequently, Ligustrum lucidum, Cupressus lusitanica and Eucalyptus sp |
Disciplinas: | Biología, Historia |
Palabras clave: | Botánica, Historia regional, Zonas urbanas, Arboles, Alameda Central, Ciudad de México, México, Revisión bibliográfica, Nueva España, Parques urbanos |
Keyword: | Botany, Regional history, Urban zones, Trees, Alameda Central, Mexico City, New Spain, Urban parks, Bibliographic review |
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